ExpoInclusión recibió a más de 5.000 visitantes –un 10% más que en su versión anterior- que llegaron al Centro Cultural Estación Mapocho, para conocer las diversas ofertas de más de 100 empresas, las propuestas de 25 fundaciones y 43 emprendedores

Noitekin, un bolígrafo para escritura Braille digital que transfiere las notas a celulares y a computadores tras convertirlo en texto estándar obtuvo el primer lugar del Inclusión Challenge, concurso que en el marco de la ExpoInclusión realizada en la Estación Mapocho, evaluó 12 proyectos para inclusión laboral y social de personas con discapacidad.

Otros proyectos distinguidos fueron TransVoz, una tecnología operada por Red Apis, que permite a personas con discapacidad transcribir en tiempo real lo que se está conversando o hablando en una charla, reunión o sala de clases.

El expositor utiliza un micrófono inalámbrico conectado al computador o smartphone de la persona y, a través de telefonía IP, el audio viaja al data center de Red Apis donde a través de inteligencia artificial se transcribe. La transcripción es recuperable en formatos como Word y PDF. También recibió un reconocimiento Key 2 Enable, teclado inteligente que otorga a personas con discapacidad física y/o cognitiva la opción de escribir y navegar sobre cualquier PC o smartphone.

ExpoInclusión recibió a más de 5.000 visitantes –un 10% más que en su versión anterior- que llegaron al Centro Cultural Estación Mapocho, para conocer las diversas ofertas de más de 100 empresas, las propuestas de 25 fundaciones y 43 emprendedores, dirigidas a la inclusión laboral y social de personas con discapacidad. Además contó con una batería de 30 ponencias, charlas magistrales de los premios nacionales de Ciencias Humberto Maturana y José Maza, y una Zona Demo, con deportes y tecnología recreativa. Este año la EI se realizará en Antofagasta (3 y 4 de octubre) y en Concepción (5 y 6 de diciembre).

En el encuentro el Ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, advirtió que menos de la mitad de las empresas locales –un 47%- ha cumplido con la ley 21.015, que obliga a contratar personas con discapacidad.

«El balance es positivo: la inclusión se abre paso como un factor esencial en la construcción de una sociedad diversa y equitativa. Más de dos millones y medio de chilenos poseen capacidades diferentes, a nivel  físico y cognitivo, y cada día se multiplican políticas, programas y herramientas que los visibilizan, estimulan sus potencialidades y facilitan su integración a la educación y al trabajo. La tecnología es un aliado fundamental para generar ambientes y plataformas inclusivas, pues elimina obstáculos, disminuye barreras y potencia talentos», informaron los organizadores.